Gracias...

 

 Gracias en todos los idiomas, en todos los colores, con gestos, desde el sentimiento y los suspiros que vuelan para que le lleguen y tiene que ser así porque no puedo dejárselas escritas en su blog.

Han sido años de seguirle, de leer sus sonetos (maestro en ellos) sus poemas y conversaciones, así las interpretaba cuando hablaba y yo "escuchaba" sobre su amigo poeta, o del mar, o de su tierra… Decidió hacer mutis, se varó en un puerto imaginario y a ratos nos añora. Nosotros le añoramos siempre.

Nos habla de arrugas los surcos de la vida, las rayas de las sonrisas, el ceño del pensamiento y nos va dedicando con su inteligencia cariños que nos llegan al alma, por eso mi agradecimiento es de todas las formas posibles. Él no sabe que voy a su blog y paseo, no le puedo dejar un abrazo, ni unas flores, ni un cachito de bizcocho, pero voy. Y me aguanto y respeto su decisión, pero…

Juan por si pasas: me has regalado una semblanza nacida de muchos años de compartir entradas, comentarios y respuestas a los mismos, donde se conoce a quien responde y a quien duda, me reconozco y te afirmo soy feliz, porque quiero serlo, soy marinera aun estando tierra adentro y por no perder la razón me acomodo en la locura.

No me guardo para mi sola el arte de Juan cuando escribe, no me guardo nada os dejo el enlace y podréis no solo leerlo también escuchar un hermoso bolero. http://juanltrujillo.blogspot.com/

 A todos disculpas por la extensión, pero sabed que me ha costado mucho resumir todo mi cariño, afecto, admiración y respeto y agradecimiento a uno de los mejores, amigos de blog.