En la imagen un ciervo durante la berrea (Por cierto, un espectáculo
único que solo dura un mes, septiembre-octubre, y que se escucha a primeras y últimas
horas del día en los parques naturales de casi toda la península, oírlo es sencillo,
pero si hay suerte y se puede ver es un regalo de la naturaleza) El bramido es
el reclamo sexual, único y gutural que el ciervo emite para reclamar a la
hembra cuando se inicia el periodo de celo.
Es evidente que todos los animales (a excepción de las
jirafas) emiten sonidos que son particulares a cada raza.
El jabalí arrua cuando huye, rebudia al sentir gente,
guarrea o ronca para llamar a la hembra; el león ruge, la vaca muge, el ciervo
brama…
¿Quién silba, chirria, barrita, estridula, chasquea, himpla?
¿Y el hombre como animal que es, que vocifera?, parece que hemos evolucionado, y aquí no emitimos ninguna voz, solo miramos, guiñamos, algún gesto de cara, etc..., hemos sofisticado el acto del reclamo sexual, pese a todo esto, unos tienen mas suerte que otros, es la suerte del más guapo.
ResponderEliminarSaludos
El hombre no necesita vociferar, ni ser guapo, todos tenemos algo que otros saben ver. Esa es la magia. Un abrazo
EliminarVamos que "El hombre y el oso cuanto más feo más hermoso", no me lo creo.
EliminarSaludos
Hola, Ester. Escuchar el sonido de la berrea si no se está acostumbrada, impresiona. Es un proceso natural que todos los años se repite.
ResponderEliminarFeliz semana. Bstes.
Acostumbrada no estoy pero lo he podido vivir algunas veces. es magnífico. Unos abrazos silenciosos Emma
EliminarUna vez tuve la oportunidad de oírlos en el parque nacional de Cazorla y era impresionante, aparte que es una maravilla de naturaleza estar allí.
ResponderEliminarUna feliz semana, y el sonido de la vida que nunca se extinga.
Besos con sonido ...
Es impresionante el berrero.
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