En un cuerpo como el mío,
como el tuyo… como el
suyo
la distancia que media
entre el corazón y el cerebro
alcanza lo justo y preciso,
para un recorrido artificioso
y fiel a las desavenencias.
Late el corazón y suspira el alma,
decide la razón y pone distancia
las emociones se amotinan,
apelando a los sentimientos
y el corazón enamorado
palpita desbocado.
La razón no se calla, impone la calma
el cerebro sensato manda obediencia
impone tiempo y cordura.
Distancia tan corta, dudas amargas.
Yo misma
Es tan lindo cuando la mente permite al corazón expresarse y esa distancia se borra, los miedos desaparecen y el amor se apodera de los espacios para colocarlos donde mismo (a la mente y al corazón) para ser personas congruentes.
ResponderEliminarBesos, querida Ester.
No siempre podemos dirigir la mente, muchas va por libre pero nos acomodamos procurando acoplarla al corazón y sacar buenos momentos. Abrazucos
EliminarCompleja máquina...
ResponderEliminarTanto que le he dado libertad para que funcione sola.
EliminarUna distancia que cada quién, ajusta a la medida que le interesa.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así debería ser, y cuando no se ajusta bien tenemos que hacer un esfuerzo. Un abrazo Alfred
EliminarTe deseo una buena Navidad Ester. Pásalo bien amiga. Que podamos acomodarmos siempre a esta máquina.
ResponderEliminarFeliz Navidad.
Un abrazo.
Vengo de tu casa, nos hemos cruzado. En unos dias cuelgo la felicitacion para todos con buenos deseos de una Navidad generosa en sonrisas. Abrazos
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