Pozo teatro
Al rey español Felipe IV (1605-1665) le gustaba que le llamasen «el Grande». Tras la pérdida de Portugal, el duque de Medinaceli (1607-1671) dijo en cierta ocasión:
—A su majestad le pasa como a los hoyos, que cuanta más
tierra pierden, más grandes son.
Me has recordado una frase de Quevedo a Maria de Austria -Reina de España- que tenia un defecto físico, cojeaba de forma muy clara, le dijo “Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad es-coja”, otro modo de insultar sin que se note mucho.
ResponderEliminarSaludos
Aquellos intelectuales de entonces, nos dejaron , aun en el parlamento, grandes frases y momentos, no se en que momento se perdió la chispa, la ultima que recuerdo fue "la república de las letras" entre algunos escritores, como Cela, Umbral, Muñoz Molina, R. del Pozo. Un abrazo
Eliminar¡Soy prime!
ResponderEliminarSí, creo que el autor de este popular dicho fue Quevedo.
Como casi todos los Austrias tenía expresión de "pasmado". Cuentan que era un gran entusiasta del sexo, no le hacía ascos a solteras, viudas, casadas, tuvo un nuerazo de hijos bastardos ¿48-50? por ahí debía ser
La amante que más le impactó fue "La Calderona"...
¡He disfrutado mucho con esta entrada!
¡Gracias, preciosa!
Un gran besote.
Tuvimos verdaderos genios en contiendas literarias, y callejeras, ahora parece que la cultura se está secando. Abrazotes
EliminarDisculpa, quería decir -numerazo-, (en mi ordenador hay unos duendecillos), jaaaaaaa
ResponderEliminarDisculpada, esos duendecillos van de ordenador en ordenador, a todos nos aparecen. Saltibrincos
EliminarComo ha contado Maricarmen, ademas de su inusitado número de bastardos, era una máquina, tuvo siete hijos con Isabel de Borbon y cinco con Marina de Austria, aunque inoperante ante las revueltas de Cataluña y Portugal, al menos es de agradecer que tuviera interés en coleccionar la mayor colección de pintura en Europa, y nombrara a Velazquez pintor de Cámara.
ResponderEliminarHemos tenido monarquía por siglos, a algunos los hemos echado varias veces, pero regresan, y aun no hemos tenido a ninguno merecedor de lo que recibe. Un abrazo Marcos
EliminarAh, no soy "prime" ni de coña, mientras escribía Emilio se me adelantó, rápido que es!
ResponderEliminarA ver qué se te ocurre para mañana, estaré espectante.
Tranquila y disfruta de tus duendecillos, ¿Han desayunado? Un saltibrinco
EliminarSiempre con esas ocurrencias tan geniales jajaja. Un abrazo y feliz semana
ResponderEliminarLa ocurrencia fue la del duque de Medinaceli, que menuda pieza tambien. Y de ahí hemos ido llegando hasta aquí jeje. Abrazucos
EliminarEl Duque de Medinaceli, debía de ser un cachondo de armas tomar y un poco pelotillero, tratando de agradar a su señor.
ResponderEliminarMucho juego de palabras existe en ocasiones para decir verdades como puños.
En el Cantar de Mío Cid (alrededor del año 1200) se recuerda cómo Rodrigo Díaz de Vivar se enfrentó con el rey Alfonso por cuestiones personales. Cuando éste le desterró de Castilla, los suyos pronunciaron estas palabras. “¡Oh, Dios, qué buen vasallo si tuviera buen señor!”
Abrazos
Podemos hacer un compendio de "ocurrencias" de vasallos o servidores que tuvieron las agallas de decir la verdad sin molestar, pero no olvidemos que nadie sirve sin recompensa, que nadie pierde la oportunidad de estar cerca de donde hay. En cualquier caso por lo menos había modos hoy ya ni gracia tienen. Un abrazo
EliminarMuy sutil el Duque...no sé si el ego del rey lo entendería...eso ya es otro cantar,jajaja
ResponderEliminarBesos.
De todas las anécdotas que hay siempre sale mejor parado el servidor o invitado, las "luces" las gastaban en otras ocupaciones mas divertidas. Aunque en este caso el servidor tambien tiene su historia. Abrazos
EliminarEstuvo sutil....
ResponderEliminarBuena semana!
Una mente hábil que supo manejar muchos hilos. Un abrazo
EliminarY muy bien dejado...Hoy por desgracia no hay intelectuales así, todo lo arreglan con insultos e improperios.
ResponderEliminarGracias Ester;)
Besos.
Les falta vocabulario y cultura, la que manejan es la urbana, la de la calle. Abrazossss
EliminarSiempre me sorprendes con tus entradas tan originales y variadas, es una gozada venir a tu casa, aunque algunas veces pase desde el silencio.
ResponderEliminarBesos muchos y feliz tarde.
No pasa nada si no dices algo, y si no vienes tampoco, lo importante es que cuando te pases por aqui encuentres entretenimiento. Saltibrincos
EliminarInteresantes anécdotas de la historia de España que no conocía.
ResponderEliminarBuena semana, Ester, con muchos saltos y brincos.
Son de la historia de España porque es la que conozco mejor, pero esas anécdotas concurren en todo el mundo, habrá que rebuscar. Un abrazo contento
EliminarIngenioso... y todos tus comentaristas, así como tus respuestas, que me hacen la mañana de este lindo lunes.
ResponderEliminarSaltibrinquemos, jajaja.
Las anécdotas de personajes son muchas, pero empiezan a ser antiguas, los actuales no tienen chispa ni cultura, algunos hasta son groseros. Saltibrincos especiales y alegres
EliminarEs interesante saber este tipo de cosas pues no deja de ser culturilla.
ResponderEliminarBuen post, Ester.
Ahí te dejo un beso ;-)
Hay muchas, y son entretenidas y te descubren la sal y la inteligencia, esa que ya no tienen ahora los personajes actuales. Abrazossss
EliminarDesconocía esta anécdota y me ha parecido genial. Tiempo atrás, se sabía usar el lenguaje sutil como arma arrojadiza, con elegante sarcasmo. Nada quedó para estos nuestros días.
ResponderEliminarUn abrazo.
Algunos discursos de las cortes eran como tesinas, y las respuestas no se quedaban atrás, ahora los insultos y la grosería resuelve las contiendas. No quedó nada, tienes razón. Abrazos
EliminarAy,estos borbones...
ResponderEliminarY estos Austrias...
EliminarJaaaaaaaa! cachetada con guante blanco! :P
ResponderEliminarBuena semana ESter, abrazucos =))))
Había chispa, pero se ha ido perdiendo, cada vez quedamos menos como tu y como yo.
EliminarSaltibrincos
Por algo ha de ser...
EliminarNos hacemos mayores! Jajaja
:DD
No es "nos hacemos" es "se hacen" Abrazuco
EliminarEl saber no ocupa lugar.
ResponderEliminarSaludos
(Escribí un poema, a ver si te gusta)
Pues voy a ir a leerlo, en cuanto termine de responderos me pongo a visitaros. ¿Que haría yo sin vuestros blogs? Abrazos
EliminarSi uno gusta que le llamen grande, es una forma de piropear. A pesar de perder se gana. Un abrazo enorme Ester.
ResponderEliminarAsí se lo hizo ver el duque, por una vez muy guasón. Un abrazo contento, tu visita me alegra mucho
Eliminar¡Qué interesante! No conocía el hecho y me ha arrancado una sonrisa.
ResponderEliminarUn abrazo, Ester
Son pinceladas amenas de una historia llena de abusos y descontrol. Te voy a contar lo que ocurrió con la madre de Estrellita Castro, una cantante de copla que falleció en 1983, y el Premio Nobel Jacinto Benavente, fue en una reunión cuando al presentarlo la madre de la cantante le dijo al Nobel, yo tengo un hijo como usted, escritor inquirió Benavente, no respondió ella, maricón.
EliminarBuenas noches y felices sueños
Interesante entrada, Ester, leyendo los comentarios me he puesto al día.
ResponderEliminarUn abrazo 🌹 buenas noches
Que bien yo tambien leo los comentarios de los blogs que visito, sino siempre casi siempre. Abrazucos
EliminarMuy buena frase.
ResponderEliminarMentes ágiles de pensamiento, ya quedan pocas que dominen ese estilo. Abrazo
EliminarSon frases ingeniosas que ya han pasado a la historia. Hoy ni se hacen ni se oyen.
ResponderEliminarUn abrazo grande, que abarca más.
Frailes, políticos, literatos... nos dejaron su sabiduría y de ella aun sacamos provecho, nuestros herederos tendrán que usar las mismas, no habrá nada nuevo. Abrazos de colores y sin lluvia
EliminarEs bueno volver a la historia y encontrar a los clásicos dándonos lecciones de lengua y sabiduría...No debemos olvidarlos nunca, Ester...Me encantó la frase de Medinaceli.
ResponderEliminarMi abrazo y mi ánimo siempre.