Mira mi niña que te quiero mucho y te doy todo lo que
me pides, te tolero los caprichos, los imposibles y las rarezas. Todo te lo
consiento.
Olvida inquietudes, pídemela y te la daré, no
te asuste verla efímera en el charco, donde se diluye en un chapoteo o se
escapa con el día. Pídemela y te la daré, la guardo en el lago, la tengo en la
fuente, espera en el mar, pídeme la LUNA y la tendrás. Pídeme la LUNA
pero... No me pidas el amor del hombre que ama a tu hermana,
no te lo puedo dar, no debiste nunca aspirar a él, tu aya te lo advirtió.
Me has pedido la luna y te la he dado, pero no me
pidas lo prohibido, llora todo lo que quieras hasta que tus lágrimas formen un
charco azul tan grande como el mar, allí puedes ahogar ese amor imposible que
te hiere tanto. Deja de pensar en él y escucha más a la mente que al corazón.
Y la niña me miró a los ojos, mientras imaginaba que el cielo era un gran
jardín donde jugar coloreando estrellas y pisando las nubes podía gritar entre
ecos de silencio, bailar al ritmo de la lluvia, hacer cabriolas en el aire, oír
cantar a los ángeles y también soñar, sobre todo soñar, sin estar dormida.
Y soñó que algún día despertaría a su lado."
Así queda el cuento con el final propuesto por
Airblue, ha
recibido tres votos.
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Mira mi niña que te quiero mucho y
te doy todo lo que me pides, te tolero los caprichos, los imposibles y las
rarezas. Todo te lo consiento.
Olvida inquietudes, pídemela y te la daré, no
te asuste verla efímera en el charco, donde se diluye en un chapoteo o se
escapa con el día. Pídemela y te la daré, la guardo en el lago, la tengo en la
fuente, espera en el mar, pídeme la LUNA y la tendrás. Pídeme la LUNA
pero... No me pidas el amor del hombre que ama a tu hermana,
no te lo puedo dar, no debiste nunca aspirar a él, tu aya te lo advirtió.
La niña llora desconsolada dejando caer sus
lágrimas sobre el charco, el lago, la fuente y el mar y de tanto llorar se secó
de pena sabiéndose lejos de poder conseguir lo que más quería que tan solo era
amar a quien no debiera.
Tener la certeza de tal circunstancia, de ese
desamor, la sumió en una tristeza irresoluble llevándola directa hacia el cielo
inmenso. Allí acompañó, siendo ya una estrella, a la blanca luna. Allí, al
fin...entendió.
Y así queda con el final propuesto por
Marinel, ha
recibido dos votos y el mío.
Mis felicitaciones a ambas y mi agradecimiento a:
manolo,
unjubilado,
Musa,
Marinel,
Ilesin,
Laura,
Airblue,
Amparo,
Luisa,
tRamos y
Sindel que
han escrito un final, a todos por participar, ha habido muy buenos
aportes. Gracias a quienes han votado y a quien ha comentado. Podéis
leerlos todos clicando “Continuará” el enlace del lateral del blog
Si alguien quiere copiar el cuento y llevárselo a su blog no tiene nada mas que copiar y pegar.