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Seguimos con Sindel. Semana 38 de 53
LIBÉLULA
Fue una tarde de agosto y entramos a tomar un
chocolate caliente, cosas del Pirineo que el frío llega cuando quiere, y en el
suelo estaba la libélula, preciosa, medía mas de una cuarta y permanecía pegada
al cristal, lo malo de la libertad no es no tenerla, sino tenerla enfrente y no
poder alcanzarla, eso le pasaba a la libélula, los reflejos de las luces y el
brillo del cristal la habían hipnotizado, ella veía a través del cristal su
libertad pero era inaccesible. Costó un poco, no obedecía, no se fiaba pero
llegó un niño que puso un trocito de caramelo en su mano y ella se subió arriba
y así la sacó de la cafetería. Solamente le hice fotos cuando la vi y ya veis
lo malas que son después me quede, nos quedamos absortos y ya no hice
fotos.
Eres bella y grácil
efímera y gentil
esbelta y sutil
eres libélula,
querida en Japón
odiada en otra nación
y envidiada desde la
creación,
son estas,
leyendas de tu condición.
Pediste alas con
ilusión
el Creador te las
concedió
alas de seda,
porte de ninfa
y vuelo sin detención.
+++
Con este regalo que nos hace Sindel os recompenso de mi pobre aporte.
+++
Con este regalo que nos hace Sindel os recompenso de mi pobre aporte.
Me ha encantado, has hecho una narración perfecta. A mi personalmente me gustan mucho las libélulas, las considero como hadas. Un abrazo grandote.
ResponderEliminarLas libélulas y las mariposas me gustan por igual, la narración es cierta y la libélula era la mas grande que he visto nunca. Abrazucos
EliminarBonitas fotos, me ha gustado tu narración, no he sido capaz de fotografiar una libélula en el Pirineo y eso que en ocasiones he visto alguna, aunque este año que las he buscado no las he visto, seguro que era por llevar la cámara preparada, trataré de hacerla de memoria y sin cámara para no asustarla ¿Lo conseguiré?
ResponderEliminarAbrazos.
Las fotos salieron con reflejos y brillos, las lamparas del techo se veían en el suelo, pero no preparé bien el móvil por miedo a que se fuera, sin embargo hubo que ayudarla, Y si era en el Pirineo en el alto Pirineo pero fue en 2013. Seguro que tu eres capaz de captar una preciosa y guardarla en tu memoria. Un abrazo
EliminarQué poco imagina esa libélula lo admirada y querida que está siendo !!
ResponderEliminarEsta semana irá de blog en blog, es la protagonista. Saltibrincos
EliminarTe ha quedado precioso, foto relato y poesía, ha salido con magia.
ResponderEliminarUn beso.
Las libélulas son hadas, de ellas hay mas leyendas que de cualquier otro insecto. Abrazos querida cuentacuentos
EliminarAunque su nombre sea libélula, aquí le llamaos "parotet", el que menos le pega es ese de "caballito del diablo", que le oído llamar.
ResponderEliminarEs que así como en Japón se la quiere y casi venera, en Mexico es un diablo , no se si será por eso. Abrazos
EliminarTu aporte es tuyo , es genial, tiene fuerza, lleno de la bella sutileza que tienen todas tus cosas
ResponderEliminarBesos
André
Gracias, por no extenderme puse una leyenda en cada verso, y el relato es cierto, ocurrió como lo he contado. Me gustan las libélulas. Saltos y brincos alegres
EliminarTiene que estar orgullosa la libelula de este texto que le has dedicado.
ResponderEliminarUn besazo.
Solo os he contado lo que pasó, nadie confiaba en que el niño pudiera sacarla de la cafetería pero lo logró, los versos son apunte cada uno de alguna de las leyendas que existen sobre las libélulas, Y la poesía de Sindel enmarcada de regalo. Un abrazo
EliminarUna poesía llena de luz, besos.
ResponderEliminarA mi me gustan las libélulas, siempre tan libres, en su hermoso vuelo.
Feliz semana.
Gracias por tus deseos, a mi tambien me gustan sus alas son encaje de seda y su volar siempre va mas allá. Un abrazo
EliminarTu aporte es bellísimo !
ResponderEliminarUn gozo leerte. APLAUSOS !
Mil besos.
Gracias preciosa, me sonroja tu aplauso, pero me hace ilusión. Abrazos contentos
EliminarTu como siempre la reina de la fiesta. Esta vez con una invitada escepcional: LA LIBÉLULA.
ResponderEliminarSaludos entrañables, amiga.
Gracias, se que es amabilidad y te lo agradezco. La libélula esta semana va de casa en casa como invitada de excepción. ¿Engordará?
EliminarAbrazos agradecidos
Qué tierno relato y qué modo tan lindo de contarlo, Ester. Y además ¡la hiciste famosa!
ResponderEliminarEs un insecto que me gusta y me recuerda el huerto-jardín de la casa de mi infancia, que en verano se llenaba de libélulas y mariposas.
Un abrazo, guapa.
El relato es cierto, así ocurrió, lastima que no hice fotos a la libélula en la mano del niño, no nos atrevíamos a movernos. Es muy bonita alas y cuerpo irisadas, en algunos lugares es muy querida y en todos preciosa. Un abrazo grande y redondo
EliminarNunca he visto a ninguna : -O
ResponderEliminarBueno esta semana vas a ver muchas en fotografía. Saltibrincos
EliminarUn bello relato con final feliz!!!
ResponderEliminarBesos!
Y parecía imposible, era muy grande quizá ya era viejita y por eso no se asusto. Fue en 2013 y y lo recuerdo perfectamente. Un abrazo
EliminarEster, creo que tuviste mucha suerte de fotografiarla y ser testigo de su rescate por ese niño...Las libélulas traen suerte, los samurais la tienen como símbolo de triunfo. Hermoso post, todo un homenaje a esa linda y misteriosa criatura. Mi felicitación y mi abrazo de luz.
ResponderEliminarM.Jesús
No me acerqué mucho por miedo a que se fuera y por eso las fotos no son muy buenas, pero me encantó ver una tan grande, son muy bonitas, ingrávidas y ágiles, hay lugares donde creen que traen mala suerte, pobrecillas. Abrazos saltarines
EliminarHermosas sus alas de cristal.... Bonito homenaje le has hecho!!
ResponderEliminarUn beso.
Así parecen de cristal, largas y finas y su cuerpo brillante, junto con las mariposas son los insectos que mas me gustan creo que los únicos. Saltos y brincos
EliminarBello texto, las libélulas son hermosas y tienen esas alitas transparentes. A mi gata le encantan pero no las atrapa.
ResponderEliminarUn beso grande.
Son decididas y tercas, nunca cejan en su empeño, lo he leído. Tu gato no las atrapa pero se divierte y juega. Abrazos
EliminarMuy bella tu aportación y es que ellas dejan una aura de magia en el ambiente.
ResponderEliminarBesos
Por eso dicen que son hadas, y en algunos lugares, que traen suerte. a mi me gusta su cuerpo irisado y sus alas esbeltas. Abrazucos
EliminarTu aporte no tiene nada de pobre, todo lo contrario. Este verano, tambien vi varias libelulas. Son hermosas y tienen algo de magia como dice ILesin.
ResponderEliminarMil besos Ester
Isa
Muchas gracias Isa, cuando leí que Sindel nos daba esta palabra recordé mi fotografía y decidí contaros la historia, me parece muy curiosa. Si has visto varias dicen que tendrás suerte, ojala. Un saltibrinco contento.
EliminarSuerte de verla tan cerca y poder fotografiarla. Tus palabras la definen magistralmente, y gracias por contarnos la historia.
ResponderEliminarUn beso.
Mucha suerte, su afán era traspasar el cristal, definirla es sencillo, lo demás son apuntes de cuatro o cinco leyendas de las muchas que hay sobre ellas. Muchas gracias y dos abrazos
EliminarTuviste un gran privilegio con esa libélula para admirarla en todo su despliegue de libertad y belleza. Un post perfecto.
ResponderEliminarAbrazo muy grande.
Esa fue la primera, y la última, vez que veía una libélula en el interior, no se como entró pero ver como la sacaron fue muy bonito, es como cuando rescatan a una animal preso por accidente. Muchas gracias preciosa, dos abrazos
EliminarEster tu aporte está lejos de ser pobre! Me encantó esa historia y sobre todo que al final la pobrecilla pudiera recuperar su libertad. El texto es magnífico, tal vez no te des cuenta, pero está relatado por partes con un toque de poesía.
ResponderEliminarEl poema me encantó! Y las fotos acompañan muy bien.
Gracias por darnos siempre algo distinto, por dejar que llegue a tu espacio y siempre me sorprenda.
Un beso enorme.
Desde luego ver al niño y su paciencia fue sorprendente y lo mejor , que consiguió su objetivo. El pseudo poema son cada verso parte de una de las muchas leyendas que existen sobre las libélulas, una palabra preciosa que nos regalaste. Y poner enmarcado tu poema un deseo de compartir lo bello. Saltos y brincos
EliminarEs el insecto más elegante junto con la mariposa. De niña acompañaba a mi padre a pescar y era una delicia verlas sobrevolar el río al anochecer, tan esbeltas y llenas de colorido. ¿Sabías que solo los machos son azules?
ResponderEliminarMe ha gustado tu descripción, es verdad que tienen porte de ninfa.
Un abrazo.
No sabía que las azules eran machos, y no voy a contar el chiste de saber diferenciar a la mosca macho de la hembra. Desde luego son delicadas y elegantes, no siempre queridas en todos los lados pero siempre señoriales. Abrazos con chispitas de otoño.
EliminarSabemos Valorar tus "Pobres" aportaciones.
ResponderEliminarmanolo
.
Jaja, Manolo tienes la virtud de alegrarme con tus comentarios, un relato real, que no he tenido que inventar, cuatro versos sencillos y dos fotografías de pésima calidad y consigo que llegues tu y e parezca mejor de lo que es. Abrazos alegres y divertidos
EliminarQué precioso lo que has escrito, que manera de entender su mirada frente al espejo...
ResponderEliminarBellísimo, me ha gustado muchísimo.
Muchos besos.
Gracias, con seguidoras como tu no necesito escusas para sonreír. Saltibrincos
EliminarEster, has escrito una deliciosa historia real y has tenido la genialidad de darle un interesante simbolismo. Te muestras observadora,con mirada poética que trasciende la realidad. ¡¡Mi enhorabuena!!
ResponderEliminarUn abrazo.
Oh! Muchas gracias, eres un cielo. Abrazos contentos
EliminarPrecioso y poético relato, querida Ester, sobre la oportuna libélula, me encantan. Besos. María.
ResponderEliminarGracias, fue una sorpresa descubrirla dentro de un local lleno de gente, Cuando Sindel nos propuso la palabra recordé que tenia esas fotografías. Un abrazo
EliminarQué bonito y qué gesto más maravilloso...cuanto debemos aprender de los niños.
ResponderEliminarUn abrazo.
Nos enseñan mucho, lo málo es que luego los educamos a nuestra imagen y semejanza. Saltibrincos
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