Seguimos con Sindel.
Semana 13 de 53, OLVIDO
Yo no te olvido, no olvido
tus manos peinándome tranzas, ni el olor a bizcocho al volver del cole, no
olvido los viajes en tren escuchando tus cuentos, no olvido tu paciencia
recorriendo tiendas conmigo, no olvido
tus consejos , ni tus mimos a mi hija, no olvido tu nombre y para que no lo
olvides te lo repito cada día, y te cuento lo que hicimos juntas, y aquello que
hiciste sola, te recuerdo como cuidaste de mi padre, y te cuento como te
gustaba la casa, y con un espejo te digo lo guapa que eres. Mientras yo no me
olvide tu tendrás mi memoria.
Que bonito lo que has escrito y que triste es la enfermedad de la memoria creo que es de las peores.
ResponderEliminarUn beso.
Ninguna enfermedad es buena, pero esta que ni duele es muy cruel. Un abrazuco
EliminarNuestra memoria sirve para alentar si sabemos dar el uso adecuado para regalarla, compartirla y en ella ¿estarán los sentimientos? , el simple roce de nuestro amor en una caricia transmite nuestro amor y nos lo devuelven.
ResponderEliminarBesos inmensos
tRamos
En estos casos las caricias y las palabras son lo importante. Saber escucharles con cara de sorpresa las mismas cosas cada dos minutos. Un abrazo
EliminarTienes mucha suerte de poder acariciarla, y recordarle cosas de vuestra vida, aunque también sufras si alguna vez no te entiende.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Siempre pedimos mas, acariciarla está bien y asiente a lo que le cuento, pero solo por verme sonreír. Un abrazo
EliminarNo olvido a ninguno de los dos, cada uno me procuró bienestar a su manera, espero no llegar nunca a olvidarlos, ni siquiera de manera inconsciente.
ResponderEliminarAbrazos
Ella es la que se ha olvidado de mi. Un abrazo
EliminarLindo e triste! beijos, ótima semana, tudo de bom,chica
ResponderEliminarMuchas gracias, la realidad no siempre es alegre, Abrazos
EliminarMuy bellas tus palabras mi querida Ester, a quien forma parte de tu vida y camino.
ResponderEliminarBesos
Una parte importante, tuve un padre maravilloso, el mejor del mundo y una madre excepcional. Siempre doy gracias por ellos. Un abrazo
EliminarPrecioso! Esa madre y esa hija fundidas en la eternidad de una memoria...
ResponderEliminarUn beso
La memoria que se borra, se diluye y no deja recuerdos. Abrazo
EliminarY en la eternidad del amor profundo y puro...
ResponderEliminarPor los comentarios, veo ahora que s tu caso.
Casi nunca suelo publicar nada personal, pero esta vez me he llevado la contraria. Un abrazo grande
EliminarHay olvidos, sencillamente imposibles, porque están rebosantes de amor...
ResponderEliminarMuy bonito, Ester, y muy emotivo.
A mí también me peinaba las trenzas...me has hecho recordar que no la olvido.
Besos.
Es lo que nos queda, recuerdos, quien sabe si estamos sembrando para dejar recuerdos, buenos recuerdos. Un abrazo Marinel
EliminarMe encanta Ester( mi madre, está algo parecido)
ResponderEliminarQué bonito es ser la memoria de ellas o ellos.
Ojalá¡ nos duren mucho
Bss y abrazos de emoción
Ojalá pueda vivir mucho, la quiero y ella me quiere, solo que a veces no se acuerda, pero se lo digo y sonríe. Un abrazo grande
EliminarAsí es. Mientras te recuerden... sigues vivo.
ResponderEliminarEso dicen en el recuerdo viven nuestros seres queridos. Un abrazo Marcos
EliminarEntrañable y sentido, ala vez que lleno de añoranza.
ResponderEliminarEs muy duro, una enfermedad cruel, no todo es tan bonito como se escribe. Abrazos
EliminarBello y emotivo. Esas cosas que nunca se olvidan, porque están en nuestro corazón y son la continuación de esa vida que nos han dedicado.
ResponderEliminarPrecioso Ester, me emocionaste.
Un beso enorme.
Gracias Sindel, el olvido de la memoria es trágico, no se recupera, no se mejora y no discrimina, no importa cuan activo seas, cuan emprendedor. Un abrazo
EliminarUna hermosa respuesta al caminante olvido, un recuerdo de amor que siempre tendrá vigencia emotiva presentación Ester, se siente al leerla, me encanto.
ResponderEliminarUn beso Marta
Conservar la memoria de lo que fue es la manera de revivir momentos felices. Un abrazo
EliminarEso es lo importante, guardar esa memoria, que aunque nuestro ser querido no tenga, ahí estamos nosotras para recordarle, y así siempre guardaremos esos recuerdos.
ResponderEliminarMuy bonito y lleno de emotividad.
Un abrazo
Es lo poco que se puede hacer, contarle los recuerdos para que sepa que fue una gran mujer. Un abrazo
EliminarMe pillas en el momento idóneo, sola, mi hija de viaje, mi marido de conferencia y hoy entro más pronto y puedo llorar sin que nadie me vea. No, no se ha olvidado de ti, hay algo que sabemos y es que tienen pequeñas descargas debido a su arterioesclerosis cerebral y hay unos segundos que ven y conocen, lo pude comprobar en mi madre. Son flases, pequeños momentos de luz que nos pasan desapercibidos.
ResponderEliminarMientras, sigue siendo su memoria, todavía puedes, yo ya no.
Un abrazo amiga, me ha gustado mucho.
Siento que hayas llorado, siento que yaya sido por mi causa. Cuando no recuerda es cuando todo está bien, cuando tiene esos momentos que dices es cuando tenemos que estar alertas para que no se de cuenta de que no sabe con quien está, y esto es la parte bonita de la enfermedad, pero tiene temporadas en que se le mueren sus padres, los dos el mismo día, y se pone muy triste. No recuerda los meses que pasó cuidando de su padre. Se que la voy a echar de menos, ahora solo la añoro. Bueno lo dejo y te mando abrazos y cariños
EliminarNo lo sientas, a veces es necesario y no te culpes, has escrito algo muy bonito.
Eliminar¡Hermoso!
ResponderEliminarEl cariño que sentimos todo lo hace posible.
Besos, buena semana
Por supuesto, todo nace desde el cariño, y cuanto mas lo necesitan mas crece nuestro cariño. Un abrazo
EliminarOlvidar es perder lo vivido
ResponderEliminarrecordar es vivirlo de nuevo
necesitamos la memoria
tanto como respirar...
A alguien se le olvidó que la necesitamos porque algunas personas se quedan sin ella . Un abrazo
EliminarA quienes nunca podremos jamás olvidar... porque son recuerdos que nos vuelven a dar la vida que ya nos dieron antes literalmente.
ResponderEliminarUn besazo de anís, mi querida Ester.
A nuestros mayores no los podemos olvidar, tenemos mucho de ellos, por genética y por cariño, por educación y por el ejemplo. Les debemos algo mas que la vida. Abrazos Sara
EliminarMuy conmovedor, no me imagino una vida sin recuerdos
ResponderEliminarporque ya no seria vida.
Un beso grande
Ya no es vida, pero la vida sigue, es así de triste. Abrazos
EliminarBueno, nos has tocado hoy el corazoncito, de hecho me he quedado medio emocionada, medio paralizada sin saber que decir,...pienso a veces en esto y debe ser muy duro vivirlo. Un abrazo, :))
ResponderEliminarLo es, ojala no lo sepas nunca. Un abrazo grandote
EliminarPrecioso... Me emociona...
ResponderEliminarMuchos besos
Gracias Carmen, simplemente es así somos los recuerdos de quien ha perdido la memoria. Un abrazo
EliminarPrecioso y emotivo. Me sacastes una lagrima.
ResponderEliminarEs muy duro vivirlo, tu eres su memoria, aunque pienso que en el fondo, siempre les queda algo de recuerdos
Mil besos Ester
Isa
Siempre les queda alguno, pero no siempre es el mismo. Gracias preciosa. Abrazos
EliminarTe cuento que Google inhabilitó mi cuenta por "actividad sospechosa") y eliminó sin más mi blog de Blogger. Por lo tanto, si quieres visitarme, puedes hacerlo en: jenofont.wordpress.com
ResponderEliminarSi, lo vi anoche y me asusté, a mi me ocurrió una vez estando fuera de casa y no sabía que hacer, al poco tiempo regresó sólito, iré a visitarte, claro que sí. Abrazos
EliminarEsos es un gesto gigante de amor, nada menos.
ResponderEliminar=)
Entre madre e hija el amor no se puede medir, simplemente lo es todo, luego está la admiración, el respeto y el reconocimiento de hija a madre. Un abrazo
EliminarEs necesario, el haberlo vivido intensamente, con ese cariño que relatas, para poderlo plasmar, luego, como tu has hecho en tu escrito.
ResponderEliminarBellos momentos, que hemos tenido la suerte, de tomar parte de ellos al leerte.
Yo los estoy viviendo ahora, pero al revés. Siendo mimado por mis hijos, que alegran mi soledad y vejez.
manolo
¡ Ah ! y por ustedes, por esas atenciones que recibo continuamente .
ResponderEliminarmanolo
Ver Comentario en el blog de AIRBLUE
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EliminarComo me alegro de tu visita, tendrías que verme dando saltos y brincos. Tu sembraste lo que recibes, lo que los dos con ejemplo les enseñasteis, y es un orgullo como padre decir que los hijos te miman, ellos son nuestro apoyo y nuestra alegría.
De atenciones nada, es solo el cariño que se te tiene. He ido al blog de Airblue, eres un encanto. Abrazos y achuchones Manolo
¿Sabes? en cuanto he leído la primera línea, me he acordado de mi abuela (fue tan madre mía como mi madre) y me he visto por un precioso momento con ella de nuevo.
ResponderEliminarTambién el "olvido" se instaló en su mente.
Puede que, en ocasiones, sea duro verlo. Pero creo que poder vivirlo con ella fue maravilloso (no sé como explicarlo mejor)
Gracias por los recuerdos.
Un beso de una enormidad elevada al infinito.
Hay personas que conocerlas es un regalo, mi abuela fue la de los cuentos, escondiendo mis travesuras, convenciendo a mi madre para que me dejara hacer cosas, ir al sitios. Me alegro de haberte hecho recordar al tu abuela. Un abrazo
EliminarQué emotivas palabras Ester, que más que palabras son un gesto de amor puro y de entrega por lo tanto recibido. A veces, llega un momento en la vida, en la que sin darnos cuenta, debemos recordar por dos. Me está empezando a ocurrir con mi madre... espero poder hacerlo con tanta ternura como la que transmites en tu escrito.
ResponderEliminarBesos!
Gaby*
Es muy duro, es una enfermedad de la que cuando se habla se escribe la parte tierna, pero es duro lidiar con ella, . Podrás dedicarle el cariño que ella te dio, la vida es un devolver lo recibido. Un abrazo grande
EliminarUfff, qué belleza de escrito a pesar del dolor que reflejan tus palabras.
ResponderEliminarEres toda dulzura en un mundo extraño en su mente.
Un beso, Ester.
Gracias, tus palabras sientan muy bien, son un soplo de aire fresco. Abrazos
EliminarLas cosas bonitas no se olvidan jamás. Mi padre falleció hace ahora ocho años y yo no me canso de hablar de él. No me duele. Me gusta. A veces no puedo contener las lagrimas y es obvio que le echo de menos pero mi forma de mantenerle aquí es recordarle, hablar de él con quienes le querían. Hablar de él con quienes no le conocían. Siempre conmigo.
ResponderEliminarHay amores imposibles de olvidar.
Muacks!
Siempre digo que no duelen los recuerdos duele la ausencia, yo también hablo de los que me faltan, presumo de como eran, y no me importa llorar, cuando lo hago me quedo muy a gusto. Gracias por tus comentarios, abrazos y achuchones
EliminarEster, este escrito rebosa ternura, amor y reconocimiento a la madre, generosidad infinita, uniendo tu memoria a la suya para que no se olvide de todo lo vivido. Es un mensaje precioso. Los más jóvenes somos "la memoria externa" de los mayores y recordar juntos es un placer.
ResponderEliminarMi felicitación.
Un abrazo.
Ellos nos dieron lo que somos, prestarles un poco de memoria es lo mínimo, pero además egoistamente pasar un rato con nuestros mayores es gratificante. Gracias preciosa, Abrazos
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