¿Tu le has puesto pegamento a
los tenedores?
¿has echado tinta en la pila
del agua bendita?
¿le has hecho muecas al
maestro?
¿has falsificado la firma de
tu padre?
¿te has reído cuando todos
lloraban?
¿has atado los pomos de las
puertas y llamado a los dos timbres?
¿has cambiado la sal por
azúcar?
¿has enmudecido ante unos
amigos de tus padres?
¿has subido artificialmente
la temperatura del termómetro?
Ahora más de una vez me quedo
con las ganas de hacer lo prohibido. ¡Prometo empezar a hacerlo!
Estupendo, date el placer de la transgresión.
ResponderEliminarPuede ser divertido, por lo menos para mí. Abrazos
ResponderEliminarCuatro de esas cosas si las he hecho. Voy a repasar las que me quedan.
ResponderEliminarY las que faltan ya sabes que hay que completar la lista y si se puede superarla. Saltos y brincos
EliminarSi Ester, tu das Ideas.
ResponderEliminarVoy a tener que hacer como en Turquía.
Pondré censura a mis nietos en Internet, para que no lean algunas Ideas. La verdad que no me gusta el café salado.
manolo
Era la pista de mi edad.
Pero si son tratadas inocentes, y no las he puesto todas jaja. Ahora lo he entendido, soy un poco tortuga, pero no me lo puedo creer. el espíritu y el carácter son muy importantes y en tu caso van por delante de algunos documentos. Un abrazo enorme y sorprendido
EliminarYo si he hecho alguna cosa de esas, por ej, subir la temperatura del termometro, jijiji. ¡¡qué gozada!! quién pudiera volver a tener, sólo eso, 10 años, sin phone ni whasapp, pero con toda la inocencia y todo el mundo por delante, con todo por estrenar, columpiádonos en la cuerda de las ilusiones.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y pensábamos que nos iba a durar siempre y que no creceríamos, que buenos recuerdos. Un abrazo lleno de ilusiones.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarA ver si ahora no meto la pezuña, jajaja
ResponderEliminarTe decía que lo prohibido siempre me ha traido y cuántas más dificultades más atracción.
Yo no era de muchas travesuras, en ese punto no les di importantes quebraderos de cabeza a mi familia, pero si les di muchas por mi rebeldía. Por ejemplo,si me rapaba el pelo no lo hacía como una travesura sino como una señal de protesta, :)
Llamar al timbre cuando iba a la ciudad claro, que yo soy de aldea, eso sí. O llamar por telf. cuando era una adolescente. No sé,igual es que ya ni me acuerdo de las cosas que hacía, jaa
Bicos.
La rebeldía es motor de juventud, me educaron en la libertad y supieron encaminar mis ideas “revoltosas” pero eso era con mas de diez años, y aún soy rebelde, menos la edad aplaca algunos fuegos.
EliminarY a veces me sorprende la falta de rebeldía de estos tiempos.
Saltos y brincos
La infancia era mucho más divertida y más infancia, cuándo no existía la tecnologia. Cachis.
ResponderEliminarY podíamos jugar en la calle y en grupo, no solos en un habitación llena de cables que parece un hospital. Yo me cachis mas jeje
EliminarTodo eso y más lo he hecho yo, pero claro no tenía móvil ni el resto de chorradas que matan la imaginación.
ResponderEliminarEn casa de mi abuela había una maleta de cartón piedra, me la llevaba a la calle y sujetaba la tapa con el dedo y cuando pasaba una señora soltaba la tapa y le rompía las medias. Mi madre se enteró y me dijo enfadada, esa señora podría ser yo. Imposible a ti te conozco. Otro día mas trastadas.
EliminarYo he hecho muchas trastadas, sin movíl y jugando todo el día en la calle ;-)
ResponderEliminarBuen miércoles.
Un beso
Debe ser añoranza de los pocos años, pero recuerdo divertirme mucho. La mayoría de cosas las tenia que hacer a escondidas de mi madre. Un abrazo enorme
EliminarMe acabo de dar cuenta de lo buena que he sido.
ResponderEliminarUn beso Ester.
Que suerte tuvieron tus padres, yo sigo siendo un poco trasto. ahora les doy guerra a mis hijas. Un abrazo niña buena u olvidadiza
EliminarYo a su edad no hice esas cosas, incluso en la actualidad no tengo IPhone, (tengo un móvil, que solamente sirve para llamar y recibir llamadas) y por supuesto no tengo Whastsapp.
ResponderEliminarPero ya de mayor y trabajando he quitado el fusible a un aparato de medida y mis compañeros se han vuelto locos hasta que han encontrado que es lo que fallaba, he puesto tres o cuatro piedrecitas en el interior de uno de los tapacubos del coche de un compañero, hasta que al punto de llevarlo al taller por el ruido, le dije lo que le había hecho, y alguna cosilla más. (Te puedo asegurar que es totalmente cierto)
Abrazos.
Me lo creo, hay que buscar la manera de divertir un poco el tiempo, ya sea en el cole o en el trabajo. Los "paratitos" modernos están muy bien en su justa medidad. Un abrazo
EliminarYo tampoco tuve todas esas cosas y no tenia tantos problemas como tienen los niños hoy -
ResponderEliminarmuakkkkk& abrazos
No las teníamos. No existían, por eso jugábamos en la calle, inventando travesuras. Dos abrazos grandes
EliminarSí, las normas encorsetan demasiado, de vez en cando es necesario romper ese encorsetamiento.
ResponderEliminarUn beso
Y mas cuando eres una niña, con las neuronas dando saltos, hay que echarle alegría a la vida y entonces a los juegos. Un abrazo
Eliminarjajaja, me he reído mucho Ester. No fui yo la que tuvo el valor de todas esas cosas, pero pienso en mis hijos. El mayor le pondría jabón al cepillo dental de su hermano, claro, cambiará el azúcar por harina o cualquier otro elemento parecido. Y tiene ganas de su cuenta de facebook pero lo estoy retrasando el más tiempo posible.
ResponderEliminarUn abrazo, Ester.
Dile que ahora el Facebook se está quedando antiguo que empiezan a usarlo los ancianos y los “genios” están buscando alternativas mas juveniles. Además de que es cierto a lo mejor puedes retrasar un poco su interés.
EliminarSaltos y brincos
hola Ester muchos dicen no perdamos al niño que tenemos, yo prefiero conservar a la adolescente...animate y haz lo que te quedo pendiente, beso
ResponderEliminarA escondidas de mis hijas que son un poco mas formales que yo, jeje. Abrazos
EliminarYo ... todo lo peor que hice fue robar manzanas verdes de los árboles!!
ResponderEliminar¿Verdes porque no estaban maduras? o ¿verdes de color? Alguna trastada tambien he hecho por los huertos, Madre mía que tiempos. Un abrazo
EliminarSi, claro que si, al menos en tres me has cazado y cuando el profe se quedó dormido en clase le encendí dos cuartillas de papel en los zapatos¡Hace tantos años!!!No sé porque decían que era traviesos. ¡Solo juguetón!
EliminarBesos
Que tiempos, nos divertiamos inocentemente, solo eramos juguetones, a veces con fuego pero cosas sin importancia. Me alegro de haberte hecho regresar a esos momentos. Un abrazo
EliminarTraviesita!! jajaja.. menudas ideas las tuyas! Algunas suenan tentadoras..
ResponderEliminarMe gustó la imagen de snoopy.. muy cierta!!! Mi primer celular lo tuve a los 24 años jaja.. como cambian los tiempos!
beso
Pues ya ves, ahora lo tiene muy pronto y muchas veces so los padres los que se los dan sin que los pidan, son otros juguetes. Un abrazo
EliminarYo, en la silla del maestro, le sacudía el borrador de la pizarra...
ResponderEliminarpobres pantalones de color azul marino.
Bss
¿nunca le serraste una pata? menos mal eso hubiera sido peor. Pero a pesar de todo les teniamos respeto y obedeciamos. Salñtibrincos
EliminarHice una, hice una!!!...jaja, estoy ya en la lista de niñas normales, no? al igual que tu, también yo sólo tenía 10 años y bien contenta que estoy por ello!
ResponderEliminarUn abrazo Ester!
Creo que todos haciamos trastadas, a veces en grupo, había que planearlas para que no nos pillaran, Casi siempre lo hacian. Saltos y brincos
EliminarJajajajaja, qué recuerdos. Muchas respuestas con síes. Pero no creo que se haya cambiado tanto, ha cambiado el entorno pero los niños siguen siendo bastante iguales. En mi opinión había más diferencia de los adultos cuando eran niños en mi época de niñez que nosotros con ellos ahora. Al fin y al cabo en la adolescencia ya conocimos los preservativos, un pequeño paso para el hombre pero un gran paso para menos humanidad.
ResponderEliminarAbrazos.
Afortunadamente se cambia despacio, pero me aceptarás que jugar en la calle era muy divertido, ahora casi imposible. Por lo demás tienes razón. Saltos y brincos
EliminarLa mayoría de los puntos del listado son NO, sólo recuerdo haber acercado el termómetro a la lámpara, para no ir al colegio, pero una vez... Ahora que lo pienso, qué infancia aburrida... jajaja.
ResponderEliminarBesos, Ester.
Pues estás a tiempo de poner remedio, aún se pueden hacer muchas cosas. Pegar una moneda de dos euros a la puerta de la iglesia, hacer la petaca a la cama (Con la sabana de arriba hacer una bolsa y no te puedes estirar cuando te acuestas) ya no te doy mas pistas. Un abrazo grande
EliminarQuien no ha hecho alguna que otra travesura de pequeño. Lo prohibido siempre atrae. La infancia nuestra era mucho mejor( mas sana), no la cambio por la de hoy..
ResponderEliminarUn abrazo
Creo que si preguntamos todos estamos de acuerdo contigo. Unos abrazos
EliminarY he tocado el timbre y he salido corriendo. He cantado por el pueblo a la hora de siesta. He envuelto piedras en papel de caramelo. He fingido estar mala para no ir al cole... Travesuras cuando no teníamos maquinitas, cuando jugábamos a contar historias de miedo, cuando salíamos a dar vueltas en bici... Yo tampoco cambio mi infancia por la de hoy.
ResponderEliminarAsí me gusta, de eso de pequeñas y ahora somos sanotas y divertidas, jugar es importante, desarrolla la imaginación, me refiero a jugar con juguetes sin pilas. Saltos y brincos
EliminarYo hice pocas cosas prohibidas de pequeña, y de jovencita las hice todas. Ahora lo prohibido me pesa mucho, he decidido que mejor no.
ResponderEliminarBesos, Ester
Cada uno su decisión, el caso es estar contenta con uno mismo. Un abrazo y cariños
EliminarUna vez en el cole, saqué tan horribles notas que muerto de pánico falsifiqué la firma de mi padre. Cuando se enteró fue mil veces peor... Así que conviene no hacer ese tipo de cosas, es lo que aprendí.
ResponderEliminarBesos!
Desde luego cuando te pescaban el castigo era superior, falsifique la firma de mi padre en un castigo que me habían impuesto por faltar a una clase, pero fue para ir a la fería así que me divertí por adelantado. Un saltibrinco
EliminarHola Ester, veo que has sido una niña algo traviesa. Yo no hice nada de todo eso, se ve que fui muy tontona y parada :-) o no me dejaron las cirsuntancias.
ResponderEliminarA partir de los 18 años me encantaba hacer todo lo prohibido. Aun así hoy día soy algo rebelde sin causa y si algúien me dice que no haga eso, yo lo hago.
Joooooo, jajaja eras un modelito de niña pero en plan sano, tan sólo travesuras inocentes.
Saludos y un abrazo
Esa es la sal de la vida, es como cuando me piden el billete del autobús y en voz un poco alta le digo "No tengo billete" y lentamente busco en el monedero el abono que no es un billete. Es llevar la contraria por que sí y por diversión, hacerlo todo bien es cansado jeje. Un abrazo
Eliminarte he echadO de menos por el blog....FALTA TE PONGO, ,EH? Oo esa entrada no va contigo ? me molesta tanta crítica de dentro y de fuera...PORQUEEEEEEE !!!!!
ResponderEliminarBesos amorrrr
Iré a verte para que me quites la falta, bueno a verte ya fuí pero no me quedé a comentar, estoy un poco liada. Las trastadas del blog si las hice y no están todas, y en cualquier momento sigo haciendo alguna, Lo de la critica no lo entiendo, ya me dirás. Un abrazo guapa
EliminarEs que entonces éramos niñas, ¡bendita cuerda para saltar!!!!, o benditas tabas. La tecnología seguirá avanzando y hay que buscar tiempo de hacer trastadas, ¿hacen los niños de hoy trastadas?, no sé, no sé......tienen demasiados mandos a distancia.
ResponderEliminarPodría contarte y no terminaría, he tenido fama de buena, pero no es verdad.. Eso sí, nunca he falsificado nada, pero me encantaba poner un bote lleno de agua inclinado en las puertas, llamar al timbre y salir corriendo.
Gamberra niña azul.
Creo que hoy no hacen las trastadas como las hacíamos antes, les deben parecer tonterías, se hacen mayores muy deprisa y sus diversiones son diferentes, apenas se juega en la calle, por lo menos en las ciudades, ir a los columpios no es lo mismo. La vida despacito pero va cambiando, no se si para bien o para mal pero es diferente.
EliminarYo me acuerdo de entonces y me río, espero que ellos tambien tengan buenos recuerdos de su niñez.
Buenos días y hasta luego me voy dentro de un ratito al dentista.
Jajaja... si yo también hice alguna de esas cosas.Me haz hecho reír, amiga.
ResponderEliminarMuchos abrazos.
Me alegro, reír es muy sano, y se mueven no se cuantos músculos, incluso quema calorías jeje. Un abrazo
EliminarEso eran travesuras, las de ahora con tanto dispositivo y tecnología a una edad innecesaria, no saben ni lo que es tener 10 años.
ResponderEliminarBesos.
Con mis nietas nos esmeramos que los juguetes sean acordes para su edad, ellas piden lo que ven en otras amigas y cuesta negarse pero siempre ganamos los adultos. Pero antes estaba la calle, los palos, las hormigas, las florecillas diminutas y sitio para correr, y ahora que se acerca el carnaval recuerdo cuando nos disfrazábamos pero nada de trajes comprados, con lo que había en el baúl o el armario de la abuela, o en casa de las vecinas y con mucha imaginación. Un abrazo lleno de recuerdos
EliminarHice todo eso y creo que mucho más, era de las aparentes mosquitas muertas¡¡¡, jopeta como nos reíamos jajajajajajja...
ResponderEliminarBesos grandes ♥♥
Cada vez se hacen menos esas travesuras, cada época tiene sus juegos y diversiones. Pero es verdad que nos reíamos mucho. Saltos y brincos
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