Hay un cuento budista que dice: Había una persona que siempre estaba a
punto de caer, pero nunca terminaba de hacerlo. Hasta que un buen día, vino
alguien y, muy generosamente, le dio un pequeño empujón para que se cayera.
Claro, porque si no se caía, no se iba a poder -finalmente- levantar.
Muy Bueno.
ResponderEliminarPorque lo Bueno es saber levantarse después del "batacazo." que te de la Vida.
Saludos, manolo
Gracias Amiga Ester.
Hoy vamos a coincidir todos, es bueno tener la oportunidad de volver a levantarse. Como se nota que no lo he escrito yo jeje
EliminarAbrazos
Es como el amigo que te da una bofetada para ayudar a despertarte.
ResponderEliminarBesos.
A mi me la dio mi padre para cortar un ataque de nervios. Mi padre y yo con mi bebe al que íbamos a acristianar, los tres en el ascensor, cuando paró y abrí la puerta había bajado a un sótano y me encontré una pared de ladrillos. Saltibrincos
EliminarTodos necesitamos a veces ese empujón.
ResponderEliminarCreo que sí, y debemos saber también cuando darlo.
EliminarMe encantan estos cuentos y leyendas Zen, siempre tan profundos.
ResponderEliminarCuantas veces hay que caerse para saborear el levantarse!
:)
Besos.
Rumi, Osho y tantos nos cuentan historias sencillas pero de calado.
EliminarNos levantamos de esos empujones con más ganas de todo.
ResponderEliminarUn beso
Asi debe ser, levantarse y empezar otra vez y con ilusión. Saltos y brincos
EliminarA veces es necesario un empujón no solo para caer y levantarte, sino para ver las cosas como realmente son.
ResponderEliminarMuchos besos.
Supongo que esa es la metáfora. Muchos abrazos
EliminarEso de empujón para que se cayera, no lo tengo yo muy claro, mira que si el que está a punto de caer se está agarrando desesperadamente a una rama que sobresale de un enorme precipicio del Tibet, de esos que te da tiempo a rezar un rosario antes de caer y el pobre hombre está diciendo "Una cuerda, porfa... una cuerda, que me caigo", eso si en uno de los 250 idiomas que componen la lengua sino-tibetana y que no hay Buda que las entienda.
ResponderEliminarY el pobre hombre recibe un empujoncito, para que pueda levantarse, sigo opinando que no le va a hacer ni pizca de gracia.
Un abrazo.
Se cayo por el precipicio y se agarró a una rama, gritó y pidió ayuda, entonces oyó una voz grave que decía: Soy Dios, suéltate que yo te sostendré.- ¡Vale! ¿Pero hay alguien más?
EliminarAbrazos
Algunos no avanzan como no sea a golpe de empujones.
ResponderEliminarUn beso Ester.
A veces los necesitamos, por cobardía, por vagancia, indecisión, es entonces cuando se agradecen los empujones. Saltos y brincos
EliminarHay veces que hay que caer para comenzar
ResponderEliminarY nos cuesta entenderlo, pero es cierto. Un editor que lo tenía todo, familia, dinero, fama, amigos y respeto perdió la ilusión por seguir adelante, entonces acudió a un psiquiatra que lo escucho atentamente y le dió la solución: Vaya a su empresa y prendale fuego, que se queme todo. Y vuelva a empezar. Entendió el mensaje y no tuvo necesidad de hacerlo. Es un caso real.
EliminarAbrazos
Esto me recuerda a otro proverbio ruso "Caer está permitido. ¡Levantarse es obligatorio!. Así a levantarse se ha dicho...;)
ResponderEliminarAbrazos de verde-mar
Me levanto para recibir esos abrazos tan bellos. Gracias guapa
EliminarMuy bien¡ lo peor, es que caigas por un barranco
ResponderEliminarBss, Ester.
Eso ya es mala leche, esperemos que en la caída nos recoja ese señor que siempre está presente en tu blog, jeje
EliminarEstá muy bien caer de vez en cuando, porque la forma de crecer es levantarse una y otra vez.
ResponderEliminarBss
Ahora entiendo porque hay gente tan rastrera, no se han levantado nunca. Lo importante es el afan de superación. Abrazos
EliminarA veces un empujón es lo que necesitamos para tomar fuerzas y levantarnos.. me gustó el cuento!
ResponderEliminarEso es lo que dice el cuento, los budistas son pacientes y sabios.
EliminarSaltos y brincos
Caigas donde caigas tendrás que levantarte, con más o menos esfuerzo, con más apoyo o menos, con heridas, o con olor a hierva humeda....
ResponderEliminarARRIBA¡¡
Besos muchos ♥♥♥
Tienes razón, no nos podemos quedar tirados en el suelo, hay que rehacerse, curarse las heridas y seguir adelante. Saltibrincos
Eliminarvuelvo porque me levante casi de silla, cuando vi HIERVA puffff
ResponderEliminaranda que tardé en caer y darle un patadon a la gramatica, sin pretenderlo hizo una breve presentación de lo que es caerse en público y levantarse en pulico.
Eso si, que el humor no falte¡¡¡
Jaja, nos ocurre a menudo, a mi especialmente con el teclado del teléfono, las teclas son tan pequeñas que es casi imposible leer lo que escribo. Pero te ha quedado muy bien, te has recuperado pronto y el publico no se ha dado cuenta, con lo bien que lo pasarían leyendo tu buen humor
Eliminarasí es...
ResponderEliminar¿A que si?
EliminarNo lo conocía y ¡me gusta!
ResponderEliminarHay muchos de estos, uno para cada situación de la vida. Un abrazo
EliminarPrefiero caerme sola, jaja.
ResponderEliminarBesos
Pero entonces no habrá nadie para ayudarte a levantarte.
EliminarSaltos y brincos
Siempre es mejor que el empujón me lo den hacia arriba.
ResponderEliminarSi me caigo ya procuraré levantarme yo por la cuenta que me tiene.
Un abrazo.
Si te refieres a la caída física te digo que cuando tropiezo y me caigo lo primero que hago, antes de ver si me he hecho daño, es mirar a ver quien me ha visto y luego me parto de risa. Un abrazo.
EliminarPues sí, hay gente que disfruta si nos caemos, y sino, nos dan ese empujoncito para reirse más, y más se ríen cuando no podemos levantarnos. En nuestra voluntad está el poder para conseguir ponernos en pie, y acallar esa risas de las malas personas.
ResponderEliminarBesicos.
Ana, yo creo que si nos empujan con mala fe se están declarando ellos solos como estupidos. Procuremos estar lejos de los necios y andar erguidos. Un abrazo
EliminarMira que sabia filosofía! Ester, te aprendo cada vez que te leo.
ResponderEliminarGracias por ese post. La imagen es estupenda!
Un abrazote y un salto feliz.
Los budistas siempre miran un paso por delante pero van despacio.
EliminarSaltos y brincos guapa
Hay que tocar fondo para poder subir. Todos necesitamos de vez en cuando ese empujón que nos haga reaccionar.
ResponderEliminarEso supongo que es lo que dice el cuento budista, ellos saben mucho. Saltos y brincos
EliminarClaro qué sí, para levantarnos tenemos que caer.
ResponderEliminarUn abrazo.
Parece una incongruencia pero es verdad. Un abrazo
EliminarEster , yo siento que está bueno el empujoncito...porque además te da la oportunidad de saber quién será el primero que extienda su mano para ayudarnos a dar el envión y levantarnos...abrazos
EliminarTu posición es muy acertada, está bien saber con quien podemos contar. Abrazos
EliminarMejor caernos para poder levantarnos y saber lo que es estar en el suelo y de pié, pero sobre todo, andando.
ResponderEliminarUn beso.
Andando, con la cabeza alta, el paso firme. Abrazos María
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