Toca escoger…

Si solo pudieras elegir dos cosas de esta lista:

helado,

patatas fritas,

pantuflas,

Martini,

cerezas,

pizza,

estilettos,

chocolate,

cava,

bambas de deporte,

para ver una película en tu casa con compañía ¿te costaría decidirte?

A mi amiga le ha costado decidirse y por no hacerme un feo:

Iba yo haciendo footing con mis bambas de deporte cuando me crucé con él, y este, me dedicó una sonrisa, un tanto descarado. Dio media vuelta y me propuso un Martini, a lo que yo, no sé por qué, acepté sin pensarlo ni dudarlo. Yo llevaba mi barrita de chocolate, la saqué y, nerviosa, le arreé un bocado. Antes de la cita nos fuimos (por separado) a ducharnos. Después, abrí mi armario y elegí mis stilettos negros y un vaquero desgastado. Nos tomamos el aperitivo y, sin darnos cuenta, se nos hizo la hora de comer, riendo y charlando. Una pizza y unas patatas fritas fue lo más acertado, rápido y barato. Y de postre, unas rojas cerezas en un precioso tarro que, tras pedir el permiso adecuado, no dudé en llevármelo. Eso sí; no faltó el cava para celebrarlo. Mi casa estaba al lado. Le invité a subir y a comernos un helado. Nada más subir me quité los zapatos; las pantuflas aliviaron mis pies cansados. Nos pusimos una película romántica y con encanto, pero, sin darnos cuenta, se nos pasó de largo, mientras nuestros cuerpos se pusieron a bailar… el mambo.